TIERRAS Y LUGARES

Cesarea—Hechos 10: 1

En griego Καισαρεια (Kaisareia; literalmente, ‘del César’). En época romana, fue una ciudad de importancia administrativa y mercantil, así como un centro de la iglesia cristiana primitiva. Se encontraba a aproximadamente medio camino entre las actuales Tel-aviv y Haifa. También se la conocía como Cesarea Marítima a fin de distinguirla de Cesarea de Filipo, población situada en el norte de Palestina, cerca de la base del monte Hermón. Herodes el Grande había construido Cesarea entre los años 22 y 10 a. C. sobre el emplazamiento de una antigua ciudad fenicia y griega llamada Torre de Straton, y le cambió el nombre por el de su protector romano, el emperador César Augusto. Tras la fundación de la provincia romana de Judea en el año 6 d. C., Cesarea se convirtió en su capital administrativa, si bien Jerusalén siguió siendo el centro religioso de los judíos durante el primer siglo de nuestra era.

El libro de los Hechos de los Apóstoles nos revela que Cesarea fue una ciudad importante para la iglesia primitiva. Felipe fue el primer evangelizador que introdujo el evangelio en aquel centro metropolitano (Hech. 8: 40). Cesarea se convirtió en el lugar de su residencia y allí recibía a sus colegas evangelizadores (Hech. 21: 8). También en Cesarea el apóstol Pedro bautizó al primer converso gentil del que se tiene constancia, Cornelio, un centurión del ejército romano. Cuando Cornelio y toda su casa creyeron en Jesús recibieron el don del Espíritu Santo, lo cual corroboró el hecho de que la salvación no está solo al alcance de los judíos sino de todos los pueblos (Hech. 10). El apóstol Pablo solía usar el puerto de Cesarea para sus viajes (Hech. 9: 30; 18: 22). Asimismo, estuvo encarcelado en Cesarea durante dos años antes de su deportación a Roma para ser juzgado (Hech. 23: 23; 25: 4) y mientras estuvo encarcelado predicó el evangelio al rey Agripa II (Hech. 25: 13–26: 32).

Las sucesivas excavaciones llevadas a cabo desde 1950 han sacado a la luz un templo romano, un anfiteatro, un hipódromo y un acueducto, confirmando así la evidencia de que Cesarea fue una capital política con las comodidades de una sede del gobierno romano. Un hallazgo de gran interés fue una inscripción romana descubierta en 1961 en la que se menciona a Poncio Pilato, el procurador romano de Judea que gobernó la provincia entre los años 26 y 36 d. C. y condenó a Jesús a morir en la cruz. Posteriores excavaciones terrestres y submarinas llevadas a cabo durante los años setenta y ochenta del siglo pasado han permitido formar una clara imagen del puerto artificial construido por Herodes el Grande. Dicha infraestructura fue una de las maravillas tecnológicas del Mundo Antiguo e hizo de Cesarea un gran centro del comercio entre el Imperio romano occidental y el Oriente Próximo.

Los descubrimientos arqueológicos de Cesarea revelan el significativo impacto de la cultura grecorromana sobre Judea en la época del Nuevo Testamento. No obstante, la predicación del evangelio transformó la ciudad en una metrópolis cristiana que acabó siendo un centro de enseñanza cristiano, así como sede episcopal durante el siglo III de nuestra era.