16 de mayo | TODOS
«Jehová es mi pastor, nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma. Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre» (Sal. 23: 1-3).
Vivimos en un mundo dominado por el dolor y la aflicción. La jornada es larga y dura. Espinas y cardos son, muchas veces, nuestro pan cotidiano. El sudor que derramamos no es proporcional a lo que recibimos y, agobiados, nos preguntamos ansiosos: «¿Hasta cuándo, Señor?». Entonces, el viento del tiempo nos trae del pasado la respuesta de David afirmando que nuestro divino Pastor busca darnos descanso y confortarnos el alma.
Para llegar a esos verdes pastos y aguas tranquilas, existe una «senda de justicia», un camino solitario que atraviesa el valle de sombra de muerte. Es una senda que baja deslizándose como una serpiente, un camino humedecido en lágrimas, con el color de rosas deshojadas, secas y marchitas, recordando lo que pudo haber sido si el pecado no lo hubiera arruinado todo.
A pesar de lo tenebroso que puede ser el camino, no hay razón para temer, porque Jesús, el Buen Pastor, acompaña el paso exhausto de sus ovejas, se preocupa por las ancianas y agobiadas, cuida de las que se encuentran heridas por el afán del camino, y muestra ternura con los corderitos tiernos.
Ya llega el tiempo, ya viene el día, ya se acerca el magno evento de la historia en el cual Dios extenderá la mesa delante de nosotros en presencia de nuestros angustiadores; ungirá nuestra cabeza con aceite; la copa de nuestro corazón rebosará de alegría y felicidad. Y ciertamente, el bien y la misericordia nos seguirán todos los días de nuestra vida, y en la casa del Señor viviremos por la eternidad.
En Acción
Cuando medites en el Salmo 23, no dudes de que es ya realidad hoy: los versículos alusivos a pruebas y peligros lo demuestran. Así, cuando pases por cualquier circunstancia, ¡alégrate de que el Pastor ya está contigo y de que él vela tus pisadas! Canta “El Señor es mi pastor” (si es posible, con tu familia).