27 de julio | TODOS
«Por tanto, así ha dicho Jehová, el Señor: “Porque habéis hablado vanidad y habéis visto mentira, por eso, yo estoy contra vosotros, dice Jehová, el Señor. Mi mano estará contra los profetas que ven vanidad y adivinan mentira; no estarán en el consejo de mi pueblo, ni serán inscritos en el libro de la casa de Israel, ni a la tierra de Israel volverán. Y sabréis que yo soy Jehová, el Señor» (Eze. 13: 8-9).
Desde que se crearon las redes sociales, las famosas fake news se esparcen como hojas de otoño llevadas por el viento. Con toda seguridad, ya te habrás tropezado con una de esas mentiras, o «bulos», que circulan a velocidad vertiginosa. Con la llegada de Internet, el derecho de los usuarios a la información se ha visto afectado por el impacto de este fenómeno. Esto no significa que Internet y las redes sociales carezcan de valor y utilidad. Pero, a causa de ellos, las noticias falsas tienen un 70% más de probabilidades de viralizarse que una noticia real.
Aunque el fenómeno parece reciente, las noticias y profecías mentirosas han existido a lo largo de la historia. En los días de Ezequiel algunos aseguraban que Dios les había revelado un mensaje, que al final se evidenciaba falso. No se puede medir el daño que una noticia falsa y maliciosa puede ocasionar. Y como Dios es la fuente de la verdad, no soporta la mentira.
En cierta ocasión Jesús les dijo a los fariseos, quienes tomaban declaraciones verdaderas y las torcían sacándolas de contexto: «Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla, pues es mentiroso y padre de mentira» (Juan 8: 44).
La mejor manera de acabar con las fake news es beber en la Fuente de la verdad y permanecer
en ella, ¿no crees?
En Acción
Como expresa el texto de hoy, quienes dicen seguir a Dios tienen una especial responsabilidad si contribuyen a propalar mentiras. ¡Vive afirmado en la Verdad, que es Jesús! Llénate de su amor y serás prudente a la hora de difundir afirmaciones sin contrastar y que pueden hacer mucho daño.