¿Qué representan las dos bestias?

«Me paré sobre la arena del mar y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos: en sus cuernos tenía diez diademas, y sobre sus cabezas, nombres de blasfemia. […] Después vi otra bestia que subía de la tierra. Tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como un dragón» (Apoc 13: 1, 11).

Dos bestias aparecen de repente en el panorama de los tiempos. La primera sale del mar; la segunda, de la tierra. ‘Bestia’ suena peyorativo e incluso insultante. Pero en profecía una bestia —o animal— es símbolo de un poder. Aquí describe a dos poderes que obran juntos en el fin de los tiempos para perseguir y forzar a los seres humanos a desobedecer a Dios.

Si lees detenidamente todo el capítulo 13, encontrarás las características de ambas bestias. La primera es un poder religioso (vers. 8). Además de religioso, es político y de alcance mundial (vers. 7). En un momento de la historia pierde su poder, pero después se recupera (vers. 3). Blasfema contra Dios (vers. 5). Persigue al pueblo de Dios (vers. 7). Su poder dura cuarenta y dos meses, lo que en lenguaje profético equivale a 1.260 años (vers. 5). Si deseas descubrir a quién simboliza este poder, necesitas identificar una institución que tenga al mismo tiempo autoridad religiosa y política, y que presente las características mencionadas.

La segunda bestia representa a un poder que parece un cordero pero termina hablando como un dragón (vers. 11). El cordero simboliza a Jesús. Quiere decir que este poder fue cristiano al principio de su existencia, pero después se desvió de su fe original. Este poder pone toda su fuerza al servicio de la primera bestia. Hace que la tierra y sus habitantes adoren a la primera bestia (vers. 12). Es un poder que deslumbra a los seres humanos (vers. 14) y le da fuerza a la primera bestia, exigiendo que se adore una imagen o representación de ella (vers. 16-17).

Busca en el mundo un país que en sus orígenes tuvo una clara orientación cristiana, pero que hoy abandonó la fe de sus padres. Identifica en él las demás características y habrás descubierto a quién simboliza esta segunda bestia. ¡Reflexiona en ello!

En Acción

Aunque encarnadas en poderes específicos, ten en cuenta que el espíritu de las «bestias», opuesto al de Dios y su amor, puede caracterizar también a cualquier supuesto cristiano. Por eso, ante todo mantente unido a Jesús.