1 julio | Niños
«Y la tierra fue profanada por sus moradores, porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto eterno» Isaías 24: 1- 5
¿Recuerdas la historia de ayer? Durante muchos años, Dios advirtió a los babilonios que, si continuaban desobedeciéndolo, serían destruidos.
Este es un ejemplo de lo que le sucederá al mundo. Hay tantas cosas malas que están sucediendo, ¿no es así? Durante muchos, muchos años, desde la desobediencia de Adán y Eva, Dios ha estado advirtiéndonos que un día el mal será destruido. Dios quiere llevar a todos al cielo, pero no puede llevarse a quienes no se alejan de su pecado. Quien se aferre al pecado será destruido junto con él.
El juicio de Dios significa que Jesús se convertirá en juez. Él mencionará a aquellos que le aceptaron y obedecieron: «¡El cielo es su lugar!». Pero a los que no lo aceptaron, les dirá: «¡Cuántas veces quise tenerlos conmigo, pero no me aceptaron! Eligieron perderse. El cielo no es lugar para ustedes».
¡Un día Dios pondrá una corona de oro sobre tu cabeza y te mostrará el hermoso hogar que él hizo para ti en el cielo!
En acción
Dibuja la corona de oro que Jesús colocará sobre tu cabeza.