11 julio | Niños
«Si retraes del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, [...] entonces te deleitarás en Jehová» Isaías 58: 13-14
El sábado es un día especial, ¿lo sabías? Desde que Dios creó el mundo, destinó un día para que todos recordáramos cuánto nos ama. Incluso después de que Adán y Eva cometieron el primer error, el sábado siguió siendo especial. Pero, con el tiempo, la gente empezó a olvidarse de este día y no lo respetaba como antes. Incluso en Egipto, donde los israelitas eran esclavos, no podían descansar.
Cuando Moisés sacó a los israelitas de Egipto, Dios les dio sus leyes y les recordó la importancia del sábado: «¡Acuérdate del día de reposo!» Al principio, todo iba bien, y el sábado se respetaba. Pero, como suele pasar, la gente empezó a desviarse nuevamente.
Dios siempre enviaba a su mensajero para recordar al pueblo sobre las leyes que había dado.
Entonces, Dios llamó a Isaías para que les recordara sobre este día tan especial. Isaías les dijo: «Si en el sábado hacéis la voluntad de Dios y no la vuestra, si hacéis del sábado un día feliz, emitiendo palabras especiales y haciendo cosas buenas, serán felices porque yo los bendeciré».
En acción
¿Qué te parece si junto con tu mamá eligen una ropa especial para el sábado y deciden qué juguetes serán solo para ese día? Será como tener pequeños tesoros que esperan toda la semana para disfrutar.