1 agosto | Niños
«Por tanto, así ha dicho Jehová, el Señor: “Ahora voy a hacer que vuelvan los cautivos de Jacob. Tendré misericordia de toda la casa de Israel y me mostraré celoso por mi santo nombre”» Ezequiel 39: 25
¡Dios es tan bueno! ¡Él es amor! ¡Él es misericordioso! Pero ¿sabes qué es la misericordia? Es un fuerte sentimiento que nace del corazón cuando vemos que alguien sufre mucho. Significa que nos ponemos en el lugar de los demás y sentimos su dolor. ¿Sabías que Dios siente tu dolor cuando sufres?
Mientras el pueblo de Israel estaba cautivo en Babilonia y sufría, Dios estaba atento. Algunos grupos regresaron a su tierra y trabajaron para reconstruir la ciudad.
Pero Dios prometió que un día toda la tierra sería restaurada y no habría más sufrimiento. Ese día aún no ha llegado, pero está muy cerca.
¿Te imaginas estar en un lugar donde puedas jugar con un león y un oso sin miedo? Yo sueño con ese día. Jesús prometió que un día todo lo malo pasará, ¡y ya no habrá tristeza!
En acción
¿Tienes algún amiguito que está sufriendo? Pídele a tu mamá o papá que te ayude a prepararle un regalito y dile: «Estoy orando para que Jesús cuide de tu corazón. Un día ya nadie sufrirá».