25 enero | Niños
«Además, escoge tú de entre todo el pueblo a hombres virtuosos, temerosos de Dios, hombres veraces, que aborrezcan la avaricia» Éxodo 18: 21
¿Disfrutas recibir visitas en casa? Moisés, un día, tuvo el placer de recibir visitas muy especiales: Jetro, su suegro, llegó acompañado de Séfora, su esposa, y de sus dos hijos, quienes habían estado bajo el cuidado de su abuelo. El reencuentro fue emotivo, lleno de abrazos y alegría. Sin embargo, Jetro notó rápidamente que Moisés estaba exhausto. La razón era evidente: Moisés se encargaba personalmente de resolver las disputas y problemas de todas las personas, lo que lo mantenía ocupado desde la mañana hasta la noche ante una interminable fila de gente esperando su turno.
Con la sabiduría de un experimentado líder, Jetro sugirió a Moisés que no era necesario que cargara solo con todas esas responsabilidades. Le aconsejó encontrar ayudantes confiables que pudieran ocuparse de las tareas menores, permitiendo a Moisés enfocarse en los asuntos más importantes. Moisés acogió el consejo de su suegro, lo que alivió significativamente su carga y mejoró la eficiencia en la resolución de los problemas del pueblo.
En acción
Tus padres son tus mejores maestros y amigos, y cuando te ofrecen consejos, es para tu beneficio. Reflexiona y nombra dos enseñanzas importantes que hayas recibido de ellos.