16 octubre | Niños
«Porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios» Hechos 20: 27
Pablo, que antes perseguía a los amigos de Jesús, ahora era un predicador fiel. Comenzó a viajar por varias ciudades hablando de Jesús a todos los que no eran judíos.
Iba de ciudad en ciudad buscando líderes de iglesias, los guiaba, animaba y oraba con ellos.
En Jerusalén, los líderes del templo se reunieron para planear arrestarlo y matarlo. Pero Pablo no tenía miedo.
Pablo no estaba preocupado por su vida. Quería ser como Jesús A Jesús no le importó dejar el cielo para venir al mundo a vivir como nosotros, a sufrir y ser asesinado. Así que lo que más le importaba a Pablo era hacer lo que Jesús había hecho. Él estaba seguro de que Dios le haría un día un regalo: ¡el cielo! Así que seguiría hablando de Jesús, aunque sus enemigos le odiaran. Todavía había mucha gente que necesitaba oír hablar del amor de Jesús.
En acción
Repite el versículo: «Porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios» Hechos 20: 27.