14 marzo | Niños
«Tu pueblo será mi pueblo y tu Dios, mi Dios» Rut 1: 16
En la pequeña ciudad de Belén había una familia feliz: mamá Noemí, papá y dos niñitos.
De repente, ya no había comida en el pueblo. La familia de Noemí se trasladó a otro lugar donde la gente adoraba a dioses extraños.
Los niños se hicieron jóvenes y se casaron con mujeres paganas. Entonces ocurrió algo muy triste. El marido de Noemí y sus dos hijos enfermaron y murieron. Noemí y sus dos nueras lloraron mucho.
Entonces les dijo a las muchachas que volvieran con sus familias. Una de ellas lo hizo, pero la otra, Rut, se negó a ir. Ella había conocido al Dios verdadero y quería adorarlo también. Así que regresó con su suegra Noemí a Belén, para vivir como vivía la gente que amaba a Dios.
En acción
Habla con tu mamá sobre la diferencia entre los dioses extraños y el Dios verdadero.