6 mayo | Adolescentes
«Muchas veces he oído cosas como estas; consoladores molestos sois todos vosotros. ¿Tendrán fin las palabras vacías? ¿O qué te anima a responder?» Job 16: 2,3
Job enfrentó una de las pruebas más duras que alguien puede imaginar, perdiendo casi todo lo que tenía: su salud, su riqueza y sus hijos. Pero una de las partes más difíciles de su historia está registrada en Job 4 al 18: el malentendido de sus amigos. Ellos vinieron con la intención de consolarlo, pero terminaron acusando a Job de haber hecho algo malo para merecer tanto sufrimiento.
La situación de Job nos muestra lo doloroso que puede ser cuando las personas de quienes esperamos apoyo no logran comprendernos realmente. Los amigos de Job pensaban que tenían todas las respuestas, pero en realidad, no entendían lo que Job estaba pasando. Esto nos enseña la importancia de escuchar y tratar de entender, en lugar de juzgar o ofrecer soluciones rápidas a los problemas de los demás.
Muchas veces, también somos rápidos en sacar conclusiones o aceptar un lado de la historia sin conocer todos los detalles. La verdadera amistad, sin embargo, va más allá. Un verdadero amigo procura ponerse en el lugar del otro, buscando entender la situación desde la perspectiva de la persona. ¿No fue exactamente eso lo que hizo Jesús?
En Acción:
Para practicar la empatía y el apoyo verdadero, intenta ser un mejor oyente hoy. Si un amigo o familiar está pasando por un momento difícil, ofrece tu hombro y tus oídos sin juicios. Recuerda que, a veces, lo único que alguien necesita es sentirse escuchado y comprendido, más que encontrar una solución inmediata a sus problemas.