28 mayo | Adolescentes

SOL Y ESCUDO

«Porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová.» Salmo 84: 11

En el Salmo 84, encontramos una hermosa descripción de Dios: Él es nuestro «Sol y Escudo». Acompáñame: «porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad.» Esto significa que Dios es como el sol que nos calienta e ilumina, trayendo alegría y vida a cada nuevo día. Él es la fuente de luz que nos guía y nos da energía para enfrentar nuestros desafíos.

Al mismo tiempo, Dios es como un escudo que nos protege. Así como un escudo defiende a un guerrero en batalla, Dios nos protege de los peligros y dificultades de la vida. Él está siempre a nuestro lado para guardarnos de todo lo que pueda hacernos daño.

Este Salmo nos recuerda que Dios no solo nos ilumina con Su presencia, sino que también nos protege con Su amor y cuidado. «¡Jehová de los ejércitos, bienaventurado el hombre que en ti confía!». Podemos confiar en Él para guiarnos y mantenernos seguros, no importa lo que suceda a nuestro alrededor. ¡Qué maravilloso es el Dios al cual servimos!

En Acción:

Sal al aire libre y encuentra un lugar donde puedas sentir el calor del sol. Cierra los ojos por unos minutos y siente el calor del sol en tu piel. Mientras lo haces, piensa en cómo el sol trae luz y calor a nuestra vida, al igual que Dios ilumina y calienta nuestros corazones con Su amor y cuidado. Luego, comparte con tu familia o amigos cómo te sentiste durante esta experiencia y qué te hizo sentir el pensar a Dios como nuestro Sol.