15 julio | Adolescentes
«Mas alábese en esto el que haya de alabarse: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová.» Jeremías 9: 24
En la escuela, siempre existen esos alumnos que se destacan por ser los mejores de la clase, obteniendo siempre las mejores notas. En el trabajo de nuestros padres, también hay personas que se enorgullecen de ser muy buenas en lo que hacen, en sus habilidades y logros. Este grupo de personas tiende a ser más orgulloso... Pero, Jeremías 9: 23-24 nos enseña una lección muy importante sobre lo que realmente debemos valorar. El texto dice: «No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que haya de alabarse: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra, porque estas cosas me agradan, dice Jehová.»
Este versículo nos muestra que no importa cuán inteligentes, fuertes o ricos seamos, lo más importante es conocer a Dios y entender Su carácter. La sabiduría que tenemos aquí en este mundo puede no significar mucho para Dios, porque Él es mucho más sabio que cualquiera de nosotros. ¿Y ser fuerte? Bueno, Dios es el más fuerte de todos y nunca cambiará. ¿Y tener muchas cosas? Eso no garantiza que seremos felices. ¡Y sabemos que todo lo que vemos es de Él! Por eso, lo que realmente importa es conocer a Dios, porque Él es eterno y todo lo que Él nos da es mucho más valioso que cualquier cosa pasajera que podamos tener aquí en la Tierra.
En Acción:
Elige un versículo de la Biblia para memorizar cada semana. Este versículo debe ser sobre el conocimiento de Dios o sobre cómo podemos vivir de acuerdo con Sus enseñanzas. Al final del año, habrás memorizado 52 versículos que te ayudarán a crecer aún más en el conocimiento del Señor.