24 julio | Adolescentes
«Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad.» Lamentaciones 3: 22,23
Misericordia es una palabra que significa tener compasión y bondad hacia alguien, incluso cuando esa persona no lo merece. Es como cuando haces algo incorrecto y tus padres te perdonan, aunque hayas hecho algo que te pidieron que no hicieras.
En el libro de Lamentaciones, el profeta Jeremías habla sobre las misericordias del Señor. Él dice: «Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré». Esto significa que, todos los días, Dios nos da una nueva oportunidad. Incluso cuando cometemos errores o hacemos cosas que no deberíamos, Dios está listo para perdonarnos y darnos una segunda oportunidad para hacerlo mejor.
Las misericordias de Dios son como un regalo especial que recibimos cada mañana. Imagina abrir un regalo todos los días y encontrar dentro de él una nueva oportunidad para hacer cosas buenas, aprender y crecer. ¡Eso es lo que Dios nos da! Él nos ama tanto que, cada nuevo día, nos ofrece una oportunidad para empezar de nuevo, para corregir nuestros errores y para vivir de una manera que Le agrade.
En Acción:
¿Qué tal practicar la «semana de la misericordia»? Durante esta semana, intenta ofrecer perdón a las personas que te han hecho daño. Si alguien te ha lastimado o hizo algo que no te gustó, intenta perdonar y olvidar, así como Dios lo hace con nosotros. También puedes hacer algo amable por alguien que quizás no ha sido tan amable contigo. Recuerda que mostrar misericordia y perdonar es una manera de ser como Jesús, que siempre perdona nuestros errores.