22 enero | Adolescentes

¿POR QUÉ DIOS INSTITUYÓ LA PASCUA?

«Guardaréis esto por estatuto para vosotros y para vuestros hijos para siempre. » Éxodo 12: 24

La Pascua es una de las festividades más significativas establecidas por Dios en el Antiguo Testamento, pues tiene una historia sumamente importante que Dios quería que todo su pueblo recordara. Hace mucho tiempo, el pueblo de Israel vivía como esclavo en Egipto, y Dios quería liberarlos. Para ello, Dios envió varias plagas y la última de ellas, la décima, era la muerte de los hijos mayores, es decir, los primogénitos. Para protegerse de esta plaga, sería necesario sacrificar un corderito y pintar con su sangre el marco de la puerta de cada hogar, para que el ángel de la muerte no «entrara» en esa casa, sino que pasara de largo. Todos los israelitas que hicieron esto, fueron librados de la muerte de sus hijos.

Dios quería que todos recordaran esta noche, así que instituyó la festividad de la Pascua. Es como un gran aniversario de cuando Dios salvó y liberó a su pueblo. Y lo mejor de todo, es que todo esto apuntaba a una liberación aún más increíble que ocurriría más adelante por medio del Mesías: ¡Jesús, el Cordero de Dios, vendría y nos salvaría de un peligro aún mayor, el pecado! En la Pascua tenemos la oportunidad de recordar esta historia y celebrar la liberación espiritual que todos podemos tener gracias al Cordero de Dios que murió por nosotros.

En Acción:

Para la próxima Pascua, hagamos algo muy especial para recordar esta historia. Necesitarás cartulina marrón para recortar en forma de la parte superior de una puerta (el marco) y pintura roja acrílica. El viernes, toma la pintura y pásala por la cartulina con tu dedo, como si estuvieras haciendo lo mismo que el pueblo de Israel hace muchos años. Coloca esta cartulina en la puerta de tu habitación durante todo el fin de semana para recordar el gran amor de Dios por nosotros y cómo Jesús nos salvó.