4 septiembre | Adolescentes
«Jesús les dijo: Por vuestra poca fe. De cierto os digo que si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: “Pásate de aquí allá”, y se pasará; y nada os será imposible.» Mateo 17: 20
El Guinness World Records es un libro famoso que registra las hazañas más increíbles del mundo. En él, encuentras personas que han entrenado arduamente para lograr cosas que muchos consideraban imposibles, como Ashrita Furman, quien ha batido más de 600 récords. Pero cuando hablamos de hacer lo imposible, ¡nadie supera a Dios! Él es el campeón supremo en realizar proezas extraordinarias.
En Mateo 17: 20, Jesús nos enseña una lección poderosa sobre la fe y las posibilidades. Dice que, si tenemos fe del tamaño de un grano de mostaza, podremos mover montañas. Jesús utilizó este ejemplo porque en su tiempo la semilla de mostaza era lo más pequeño conocido. Hoy en día, podría haber mencionado un átomo o una partícula minúscula. Esto significa que, con fe en Dios, podemos superar desafíos enormes y lograr cosas que parecen imposibles.
Lo que Jesús estaba diciendo es que, si nuestra fe es pequeñísima, ya es suficiente. No es que no debamos esforzarnos por fortalecer nuestra fe, pero incluso si es tan pequeña como la menor partícula, como una semillita diminuta, para Dios es suficiente. Tener fe es estar convencido de cosas que no vemos, es tener fidelidad, firmeza y aferrarnos a nuestras creencias. Para aumentar tu fe, estudia más la Biblia, procura obedecer lo que Dios nos pide y confía en que, con Dios, no hay límites para lo que podemos alcanzar, ¡porque Él lo puede todo!
En Acción:
Pídele a tus padres que te ayuden a encontrar un grano de mostaza, pégalo en un papel y haz un marcador de página para tu Biblia. Te servirá como un recordatorio de que para Dios nada es imposible.