1 marzo | Adolescentes

¡SÉ FUERTE Y VALIENTE!

«Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.» Josué 1: 9

Somos valientes cuando enfrentamos algo que parece grande y aterrador, pero seguimos adelante de todos modos. Josué, por ejemplo, tuvo que ser muy valiente para liderar a todo un pueblo. Él sería el sucesor de Moisés, el gran libertador de su pueblo. ¡Qué responsabilidad! Puede que al principio se haya sentido un poco asustado, pero confió en Dios e hizo cosas increíbles.

Para nosotros, ser valiente puede significar hablar frente a la clase, matar una cucaracha, intentar un deporte nuevo, admitir un error o incluso defender a un amigo que está siendo tratado injustamente. La valentía es levantar la mano para responder una pregunta difícil en clase o ser el primero en pedir disculpas después de una pelea.

Esto no significa que no tendremos miedo o un «nudo» en el estómago, sino que aún así, avanzaremos confiando en que Dios nos dará la valentía necesaria. Él nos ayuda a ser fuertes, como Josué, y a enfrentar nuestros miedos. Cuando nos sentimos pequeños o asustados, podemos recordar que Dios está con nosotros, dándonos fuerza y valentía para hacer cosas que nunca pensamos ser capaces de hacer, ¡o incluso imposibles! No temas ni te desanimes, porque el Señor, tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas.

En Acción:

Desafío del día: ¡Haz flexiones con tu familia! Si es difícil, usa las rodillas como apoyo. Así como las flexiones nos hacen físicamente más fuertes, las pruebas de la vida fortalecen nuestra fe y valentía. Empieza con algunas flexiones hoy y trata de aumentar un poco cada día. Recuerda, cada flexión es un paso más para volverte más fuerte, así como cada desafío nos ayuda a crecer de alguna manera.