15 enero | Jóvenes

Noviazgo

«Así sirvió Jacob siete años por Raquel; y le parecieron como pocos días, porque la amaba» (Gén. 29: 20). 

¿Qué es lo que la Palabra de Dios dice sobre el noviazgo? Nada. En la época en que se escribió la Biblia, no existía este tipo de relación. Los matrimonios solían arreglarlos los padres de los futuros cónyuges. La historia bíblica que se acerca más a un noviazgo moderno es la historia de la pasión de Jacob por Raquel. Su encuentro parece haber tenido como resultado un amor a primera vista. Enamorado, Jacob trabajó muchos años para casarse con Raquel, casi cuatro veces el precio de la dote de una novia en ese momento. ¡Qué hermoso es el amor!

Aunque la Biblia no habla sobre el noviazgo, conviene examinarla para conocer la opinión de Dios sobre el tema. «Si alguna vez se hace necesaria la Biblia como consejera, es antes de dar un paso que ata a dos personas para toda la vida» (Elena G. White, Mensajes para los jóvenes, pág. 316). Los valores, metas y comportamientos de dos personas cristianas que están saliendo deben basarse en los conceptos y propósitos divinos.

La visión bíblica del noviazgo es diferente a la presentada por los medios de comunicación. La Biblia no es un manual sobre el noviazgo, pero presenta algunos principios. Entre los más importantes, está el hecho de que «enamoramiento» no es igual a amor. Enamorarse es cuando alguien dice que no puede vivir sin ti, que sin ti no es nada, y que su vida parece vacía y sin color cuando no estás cerca. Esto puede ser emocionante en el momento, pero no sostiene una relación a lo largo de los años.

El noviazgo debe basarse en el compromiso. El joven cristiano no entra en una relación solo para recibir. Todos los días, Jacob se levantaba e iba a trabajar pensando en el valor inestimable de Raquel. Pasaron siete años, y luego otros siete. Debido a su inmenso amor por ella, Jacob ni siquiera se dio cuenta del tiempo que pasaba. ¡Espero que encuentres un amor así! Quien ama está dispuesto a todo para ver la felicidad del otro. El amor es un sentimiento sacrificial.

Si deseas ser feliz en esta área de la vida, debes estar dispuesto a renunciar a muchas cosas por alguien. Sobre todo, necesitas alinear tus pensamientos con los de Dios. Él es la fuente del amor y seguramente lo ha depositado en el corazón de alguien especial. Pídele que te ayude a encontrar a esa persona.