28 junio | Jóvenes

El plan emanuel

«Por tanto, el Señor mismo os dará señal: La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emanuel» (Isa. 7: 14). 

Vamos a recordar. En su Evangelio, es como si Juan dijera: «Confiad en Jesús. Él es quien dice ser. La vida consiste en conocerlo». En el Apocalipsis, el resumen de su mensaje podría ser: «No habéis visto nada aún. Seréis lanzados al ojo del huracán. Pero todo está bajo control, porque el Cordero de la cruz es el León del cielo. ¡No os rindáis!». Y en sus epístolas, Juan hace una invitación: «Hijitos, aprended a caminar como Jesús caminó. Acercaos a él y disfrutad de su gran alegría».

El plan de Dios está en orden. Puedes llamarlo también el Plan Emanuel. Dios está con nosotros. Siempre planeó estarlo. Dios está con nosotros ahora. Y estará con nosotros al final. Solo aquellos que creen en Jesús, confían en él y aprenden a caminar con él en cada paso del viaje pueden disfrutar de esta bendición.

El cristianismo es un estilo de vida marcado por la comunión con Dios, que otorga gracia a todos los que creen. Confiar en él es una experiencia de fe. Conocerlo es como conocer a un amigo. Puedo hablarles de mi mejor amigo. Puedo dar detalles sobre él: dónde vive, qué le gusta hacer y las cualidades que me hacen quererlo. Pero nunca podrás amar a mi amigo como yo lo hago, porque no lo conoces. Solo aprenderás a amar a Jesús cuando lo conozcas personalmente.

Jesús no está a tu lado solo cuando las cosas van bien y estás viviendo en santidad. Él está contigo no por quién eres, sino por quién es él. Su amor es incondicional. Su promesa a los discípulos sigue siendo válida: «Siempre estaré contigo», te dice a ti también. ¿Por qué está Jesús con nosotros? Porque él es Emanuel, Dios con nosotros. Todo el tiempo.

No importa lo que haya pasado, él está conmigo. Incluso cuando nada tiene sentido, él está conmigo. Aunque no entienda cada detalle, él está conmigo. No importa lo que digan los demás, él está conmigo. No importa lo que mis emociones me hagan sentir, él está conmigo. No importa lo que arrecien mis dolores, ni lo que contenga mi cuenta bancaria, él está a mi lado. En la parte más oscura del camino, lo que nos mantiene llenos de vida es la certeza de que Dios está con nosotros.

¿Qué pasaría si todos los que se llaman seguidores de Jesús decidieran vivir como si Jesús realmente estuviera con ellos? Tú puedes ser precisamente la persona que él está buscando hoy para ser su amigo.