Mujeres menos conocidas de la Biblia
La hija de Jefté
Fue hija de un líder y comandante de Israel, de la tribu de Manasés, quien fue juez durante seis años. Al ir a la batalla contra los amonitas, Jefté prometió que cualquiera que saliera de su casa para recibirlo cuando regresase victorioso, sería ofrecido en holocausto a Dios (Jueces 11: 29-31). Como su hija corrió a recibirle, él la «sacrificó». Existe cierto conflicto entre los estudiosos sobre si el sacrificio se refiere a su virginidad («ella no conoció varón») o si la sacrificó en holocausto (Jueces 11: 28-40). En cualquier caso, esta historia es un ejemplo de cómo las mujeres pueden ser víctimas del ego masculino y de sus conflictos sin tener culpa alguna. Hay quienes sugieren que las mujeres no deberían someterse tan fácilmente a una obligación o voto hecho por otra persona. Otros realzan la realidad de cuán fácilmente las mujeres son forzadas a cumplir normas culturales que dictan su conducta, dejándolas sin opciones reales. La historia de la hija de Jefté —una mujer sin nombre, sin descendientes, sin control sobre su propia vida y sin nadie para protegerla— es una historia que nos advierte sobre cualquier grupo o sociedad que degrade a los demás a este nivel. El resultado final es aterrador.