Virtudes
Seguridad
Sentirse a salvo y tranquila son consecuencia de tener seguridad. La mujer con flujo de sangre había estado viviendo insegura durante doce años. En todo este tiempo, tuvo prohibido tocar a sus familiares o acercarse demasiado a ellos para no contaminarlos.
Para que una persona se sienta segura, necesita confiar en aquellos con quienes trata. Jesús nos ofrece una seguridad que llenará de paz interior cada momento de nuestras vidas. Manteniendo una estrecha relación con Jesús nos sentimos seguros y felices. Necesitamos ponernos en sus manos cada mañana sabiendo que, si permanecemos en él, no hay nada que temer.