¿Cómo leer e interpretar a Elena White?
Con miles de páginas manuscritas disponibles, leer y comprender los escritos de Elena White puede parecer desalentador. Algunas de sus declaraciones resultan extrañas o insólitas en un entorno moderno, pero los mismos principios que usamos para entender e interpretar la Biblia podemos usarlos también para comprender los escritos de Elena White.
Aquí tienes una guía rápida:
- Lee abriendo tu corazón a la dirección del Espíritu Santo. Al fin y al cabo, el mismo Espíritu Santo es quién estuvo presente e inspiró tanto la Biblia como los escritos de Elena White (2 Ped. 1: 20-21).
- Acércate al texto con una mente abierta. Deja de lado cualquier idea preconcebida o prejuicio que tengas. Lee las fuentes por ti mismo y no dependas de las interpretaciones que otros han hecho de cualquier pasaje en particular.
- Asegúrate de que entiendes el vocabulario, ya que algún término o palabra en particular puede haber cambiado de significado a lo largo del siglo pasado. Por ejemplo, Elena White describe la enseñanza como «el mejor trabajo», usando la palabra «buen» (en inglés nice) con el significado de ‘exigente’ o ‘de gran precisión’, un significado que todavía usamos hoy cuando decimos «buen trabajo» (Nice job).
- A igual que hacemos al estudiar la Biblia, compara cada pasaje con otros versículos relacionados con él. Asegúrate de que has leído suficientemente sobre el tema antes de sacar tus conclusiones.
- Estudia el contexto y ten en cuenta las líneas generales del conjunto de sus escritos. Recuerda que ella sitúa todos sus escritos dentro del marco del gran conflicto, teniendo siempre a Jesús en el centro de su punto de mira. Pregúntate: ¿A quién se dirige este escrito? ¿De qué tema trata? Aquí es donde los volúmenes anotados de los escritos de Elena White pueden ayudarte.
- Busca los principios bíblicos subyacentes que te ayuden a comprender los pasajes en cuestión.
- Evita los extremos. No seas un lector sensacionalista que busca algo sorprendente en que focalizar su atención, excluyendo todo lo demás que ella haya escrito sobre el tema.
- Finalmente, no dejes de lado el estudio de la Biblia. Usa los escritos de Elena White como complemento, pero no para sustituir tu estudio de la Biblia.
